24/12/12

Pequeña invasión silenciosa y pacífica

Bombas  de color rojo, impactan en cada brizna de hierba. El viento mueve las hojas que traen el aroma que todos huelen. Una falsa primavera toma protagonismo.
Yo tumbada sin más compañía que el Sol, me pongo a pensar como cada día, como cada hora como cada segundo de mi vida.
El aroma me envuelve y el pacífico bombardeo muy a mi pesar no cesa.
El numero dos.
Y el uso excesivo del "nosotros".
Hasta la música y las historias de papel, parecen infectarse de tan maravilloso perfume.
Un perfume que mi ser se niega a oler.
Un perfume que deseo y a la vez rehuyo.
Puede que no pueda cambiar las cosas.
Puede que no me quede más remedio que esperar.
Puede que mi papel no sea actuar. Puede que mi inseguridad tome un papel decisivo.
Puede que todo en realidad sea nada. Puede que la nada sustituya al todo.

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